martes, 6 de julio de 2010

Hoy

  • Las personas de éxito no se abaten con sus fracasos, sino que renuevan su entusiasmo y ensayan nuevas estrategias
  • Las personas de éxito se responsabilizan de su propia vida y seleccionan todo lo que atañe en su dirección
  • El tiempo es un caudal que no se desperdicia en culpar a otras personas de las derrotas ni en lamentarse
  • No desanimarse cuando no se reciben frutos inmediatos. Todo necesita tiempo para germinar

  • Soñar sobre un objetivo concreto conmociona internamente, tomando la actitud precisa para ir a su encuentro.
  • A fuerza de voluntad y representación los sueños se vuelven realidad. El cerebro va forjando el camino hacia ellos.
  • La confianza debe estar en la valoración objetiva de nuestras facultades y nuestra constancia en entrenarlas.
  • Sólo con fe, deseo y confianza nos entrenaremos animosamente y haremos realidad nuestro sueño.
  • No hay que descuidar ninguna facultad y la imaginación es una de ellas. Cultivarla es fundamental porque dará beneficios ilimitados en nuestra vida.

sábado, 20 de febrero de 2010

Prioridad de los Paradigmas

Una investigación histórica profunda de una especialidad dada, en un momento dado, revela un conjunto de ilustraciones recurrentes y casi normalizadas de diversas teorías en sus aplicaciones conceptuales, instrumentales y de observación. Sin embargo la búsqueda de reglas para la tradición con respecto a una investigación se convierte en una fuente de frustración profunda, mucho menos satisfactoria que la de paradigmas.

Un paradigma puede dirigir las investigaciones, no se depende de la formulación de reglas. No existe un conjunto de características que sea aplicable simultáneamente a todos los miembros de la clase y sólo a ellos. Hay familias con redes de semejanzas.

Con frecuencia, sin conocer del todo o necesitar conocer qué características les han dado a ciertos modelos adquiridos por medio de la educación, se consideran paradigmas de la comunidad. Por ello, no necesitan un conjunto completo de reglas.

Los científicos nunca aprenden conceptos, leyes y teorías en abstracto y por sí mismos. El proceso de aprendizaje de una teoría depende del estudio de sus aplicaciones, incluyendo la práctica en la resolución de problemas. A lo largo de la vida los problemas que les son asignados son más y más complejos y con menos precedentes, pero continúan siguiendo de cerca al modelo de las realizaciones previas.

Es posible suponer que el científico intuitívamente ha abstraído reglas del juego para él mismo, por medio de la habilidad para llevar a cabo investigaciones brillantes.

Thomas Kuhn - La estructura de las revoluciones científicas cap 5.